Cinco edificios de Oaxaca que definen su riqueza arquitectónica

La ciudad de Oaxaca resguarda una arquitectura que mezcla lo colonial, lo barroco y lo contemporáneo. Los edificios de Oaxaca no solo embellecen sus calles, también narran siglos de historia y tradición. 

Cada rincón de la ciudad invita a descubrir formas, texturas y materiales que revelan siglos de pensamiento arquitectónico y expresión cultural.

Entre plazas, calles empedradas y construcciones emblemáticas, Oaxaca ofrece una experiencia visual y espiritual que enriquece la identidad de México. Aquí presentamos cinco construcciones emblemáticas que definen el carácter cultural de esta capital.

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Templo de Santo Domingo de Guzmán

Este exconvento del siglo XVI se ubica en el corazón de la ciudad. Su fachada renacentista y su interior barroco lo convierten en uno de los edificios de Oaxaca más admirados. 

Actualmente alberga el Centro Cultural Santo Domingo, que incluye el Museo de las Culturas de Oaxaca y el Jardín Etnobotánico.

Teatro Macedonio Alcalá

Construido entre 1903 y 1909, este recinto cultural destaca por su estilo art nouveau y su cúpula decorada con querubines dorados. 

El teatro ofrece espectáculos de música, danza y teatro, y representa uno de los espacios más elegantes entre los edificios de Oaxaca.

Basílica de Nuestra Señora de la Soledad

Finalizada en 1690, esta iglesia barroca se construyó en el sitio donde, según la leyenda, apareció milagrosamente la imagen de la Virgen. Su fachada ornamentada y su historia la convierten en un punto de referencia espiritual y arquitectónico.

Centro Cultural San Pablo

Ubicado en un antiguo convento restaurado, este centro promueve el arte contemporáneo y la cultura indígena. Sus patios y salas de exposición ofrecen un espacio de reflexión y aprendizaje, consolidándolo como uno de los edificios de Oaxaca más activos en la escena cultural.

Catedral de Oaxaca

Situada frente al Zócalo, esta catedral de cantera verde se construyó en el siglo XVI. Su fachada imponente y sus esculturas religiosas la convierten en un símbolo de la ciudad. A lo largo de los años, ha resistido terremotos y remodelaciones, manteniendo su esencia histórica.

Estos cinco edificios de Oaxaca representan distintas épocas, estilos y funciones, pero todos comparten el valor de preservar la memoria colectiva y enriquecer la vida cultural de la ciudad.

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